SpaceX, la compañía espacial dirigida por Elon Musk, ha desvelado el diseño del vehículo que se utilizará para desorbitar la Estación Espacial Internacional (ISS) tras ser seleccionado por la NASA para la tarea. Al contrario de lo que cabría esperar, el diseño no presenta brazos mecánicos futuristas ni tensores metálicos gigantes. El vehículo responsable del impulso final será una cápsula blanca con múltiples propulsores, similar a los módulos actuales de la estación.
SpaceX mantiene en secreto los detalles técnicos de este remolcador. Sin embargo, con motivo del inicio de las negociaciones con la NASA, revelaron que el vehículo tendrá seis veces más combustible que la nave Dragon y será cuatro veces más potente. El Dragón es el vehículo que utiliza SpaceX para enviar humanos al espacio de forma privada y ha visitado la Estación Espacial Internacional 42 veces, haciendo un total de 46 vuelos.
Una innovación en remolcador espacial.
Dana Weigel, directora del programa de la estación espacial, explicó durante una transmisión de la NASA que actualmente no existe ningún vehículo que satisfaga las necesidades del programa de desorbitación de la ISS. Sin embargo, SpaceX puede aprovechar el hardware y el software que ya se han probado en el espacio. Aunque la estructura del nuevo vehículo se basará en el diseño del Dragon, aproximadamente la mitad será nueva e incluirá tecnología de desorbitación 100% innovadora.
Weigel comentó que el contrato entre la NASA y SpaceX se centra exclusivamente en la construcción del vehículo, proceso que podría tardar entre cinco y ocho años. Aunque el retiro oficial de la ISS está previsto para alrededor de 2030, la NASA decidió iniciar los procedimientos de inmediato.
El futuro de la exploración espacial
La NASA también publicó detalles sobre Gateway, la plataforma que sucederá a la ISS. Gateway será una estación de investigación que orbitará la Luna y servirá como base para el programa Artemis, cuyo objetivo es explorar más allá de la órbita de la Tierra.
Desafíos en la desorbitación de la ISS
Uno de los principales desafíos es la retirada precisa y segura de la ISS de 420 toneladas. La NASA está buscando el mejor proveedor para este proyecto y en junio seleccionó a SpaceX para diseñar el vehículo deorbital con un contrato potencial de 843 millones de dólares.
La ISS ha estado en órbita durante 25 años, albergando a 270 astronautas de varias naciones y facilitando 3.300 experimentos en condiciones de microgravedad. A pesar de su éxito, la estación comenzó a mostrar signos de envejecimiento, con fallas en la infraestructura y el equipo.
SpaceX y futuras misiones
SpaceX seguirá colaborando con la NASA en múltiples misiones espaciales. Su cohete más potente, el Falcon Heavy, enviará tecnología de recuperación de material al asteroide Psyche y a la Luna y también lanzará la sonda Europa Clipper a Júpiter.
El retiro de la ISS marcará el comienzo de una nueva era en la que empresas privadas y gobiernos colaborarán para explorar nuevas fronteras en el espacio, creando puntos críticos para la investigación científica y el turismo. La NASA, por su parte, se centrará en el Portal Lunar, que funcionará como un centro clave entre la Tierra y la Luna.